En un movimiento sorpresivo para el mundo del social media, Twitter inició un proceso de cambio de marca que está convirtiendo a la icónica plataforma del pajarito azul en “X”. Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, quien adquirió la red social en 2022, anunció la transformación oficial a través de un tweet en el que indicó que «Twitter fue adquirido por X Corp tanto para garantizar la libertad de expresión como para acelerar X, la app de todo (…)
El nombre de Twitter tenía sentido cuando solo eran mensajes de 140 caracteres que iban y venían, como pájaros trinando, pero ahora puedes publicar casi cualquier cosa, incluidas varias horas de video. En los próximos meses, agregaremos comunicaciones integrales y la capacidad para conducir todo su mundo financiero».
Este significativo cambio establece un nuevo momento en el proceso de transformación de la ahora antigua red social, que no solo impactará su relevancia individual sino también movilizará cambios en la escena tecnológica y digital del mundo.
Adiós pajarito, ¡Hola X!
En el competitivo mundo de las redes, las plataformas sociales deben permanecer un paso adelante para mantener el interés y compromiso de sus usuarios, y frente a los acelerados cambios de la audiencia y la introducción constante de nuevas funciones e intereses, se arriesgan a tomar decisiones con el propósito de mantenerse relevantes.
En el caso de Twitter, ahora X, los cambios visibles en la marca son solo la punta del iceberg. Tras bambalinas, Musk lleva varios meses implementando cambios importantes, desde recortes de personal y eliminación de cargos, hasta modificaciones en las características de la plataforma. Sin embargo, el cambio de nombre y de marca son los que más han causado conversaciones alrededor del globo.
Modificar el nombre, personalidad y atributos de una marca bien establecida como Twitter, si bien presenta una gran oportunidad, es decirle adiós al trabajo de 15 años para crear un escenario digital que es parte de la cultura moderna. Con esta modificación le decimos adiós al pájaro azul y le damos la bienvenida a un nuevo panorama con posibilidades ilimitadas.
Impacto en el contexto digital
Este cambio de marca significa una transformación monumental en el contexto de las redes sociales. A medida que Twitter hace la transición a X, no solo está alterando su identidad estética; está remodelando fundamentalmente su adn y su dirección futura.
Una transformación tan dramática, por supuesto tiene un impacto en el entorno, abre la puerta a cambios en el comportamiento de los usuarios, y da paso a nuevas ideas para otros gigantes del social media. Un ejemplo claro es el lanzamiento de Threads, una nueva aplicación basada en Instagram, lanzada por Meta, con un estilo similar al de Twitter y que ahora es competencia directa de X.
El futuro de X
Para nadie es un secreto que la respuesta primaria al cambio es la resistencia, sin embargo, con la perspectiva correcta, toda transformación también trae sus propias posibilidades. En el caso de X, a pesar de la incertidumbre generada por la novedad, su llegada ha generado entusiasmo y curiosidad. Y es que si bien, desde que Musk asumió el liderazgo, los usuarios de su compañía disminuyeron, el interés por X ha alcanzado alta participación e incluso ha atraído a nuevos usuarios que nunca tuvieron una cuenta con el logo azul.
El cambio de marca, en este punto, señala una movida estratégica hacia la creación de una aplicación más integral y conectada con las necesidades e intereses del futuro. Siendo claro que la visión de Elon Musk para X se extiende más allá de las redes sociales, pretendiendo incorporar una variedad de nuevas actividades que elevarían la experiencia de los usuarios.
Según Insider Intelligence, X perdería más de 32 millones de usuarios en todo el mundo para 2024 debido a la agitación causada por el cambio de marca, asunto que se acentúa teniendo en cuenta que anteriormente, era posible navegar limitadamente Twitter sin una cuenta, pero ahora debes tener un perfil para acceder a las publicaciones. Lo cierto es que todo esto dependerá de la ruta de la transformación, las nuevas características y los siguientes pasos del proceso.
Opiniones divididas
Las opiniones sobre la transición a X están notoriamente divididas. Algunos la ven como una apuesta arriesgada que potencialmente podría comprometer el arduamente construido valor de marca de Twitter, mientras que otros la aprecian como un paso visionario hacia la innovación y el crecimiento.
Cuando las marcas se convierten en verbos han alcanzado el “santo grial” de convertirse en parte de la cultura popular, dijo Mike Proulx, Vicepresidente y Director de Investigación de Forrester y por ello, descartar el haber logrado que el “trino” o “twittear” fueran palabras del día a día es uno de los aspectos que genera más dudas.
A pesar de la controversia, el cambio de marca también es visto con buenos ojos. Una encuesta realizada por CivicScience -en una muestra pequeña de 5.000 personas-, encontró que el 36% de los usuarios diarios y el 43% de los usuarios semanales tienen una percepción positiva acerca de la transición a X. Mientras que tan solo el 27% de los usuarios diarios y el 27% de los usuarios semanales lo perciben negativamente.
El tiempo lo dirá…
Aunque constantemente vemos cambios en los algoritmos y reglas en las plataformas digitales, la transformación de Twitter a X es una muestra clara de la naturaleza dinámica de la industria de las redes sociales y la posibilidad latente de cambios más evidentes e impactantes. La llegada de X simboliza la necesidad de que las plataformas evolucionen y se adapten, mientras en el proceso tienen en cuenta la opinión de sus usuarios.
Queda por verse si el gran movimiento impulsado por Musk dará buenos frutos en el largo plazo. Sin embargo, una cosa nos queda clara: en algún momento las cosas siempre tienen que cambiar.